Efemèrides
Se inaugura un monumento al Premio Nobel Jacinto Benavente por iniciativa de la SGAE
Aquellos que visiten la sede actual del Centro de Documentación de las Artes Escénicas y de la Música tendrán muy cerca, un paseo de cinco minutos, el bello parterre del Parque del Retiro, que se abre frente al Casón. Allí podrán encontrar el monumento a Jacinto Benavente.
Fue una iniciativa de la Sociedad General de Autores de España, la SGAE, de la que Benavente era presidente honorario desde 1948, en la junta celebrada en 1954, año de la muerte del escritor. Se encargó la obra a Victorio Macho, que había regresado del exilio en 1952, y el 24 de abril de 1962 se inauguró el monumento en el Parque del Retiro de Madrid, en un lugar cercano al que ocupaba otro monumento dedicado a su padre, el eminente doctor Mariano Benavente. Cuentan las crónicas que la lluvia obligó a terminar el acto de homenaje en el Ayuntamiento, que contó, entre otras intervenciones, con el prólogo de Los intereses creados (“He aquí el tinglado de la antigua farsa...”) recitado por el actor Manuel Dicenta, que había protagonizado la obra unos años antes, en la producción que dirigió José Tamayo en el Teatro Español de Madrid.
Para dar una idea de la importancia de Benavente en la Historia del Teatro español basta decir que es el último dramaturgo español que ha obtenido el Premio Nobel de Literatura: en 1922. Benavente (Madrid, 1866-1954) llevaba para entonces treinta años escribiendo teatro y había estrenado más de ochenta obras; al final de su vida había llegado a estrenar ciento setenta y dos, entre las que han quedado algunos hitos de la escena española, como Rosas de Otoño (1904), Los intereses creados (1907) o La malquerida (19013). Como suele suceder, el éxito de sus obras y el gran número de estrenos ocultan otros aspectos, como la ambición artística mostrada sobre todo en sus primeras etapas y la cercanía, por ejemplo, a la literatura de autores como D’Anunzio, Bernard Shaw o Wilde, o la de su amigo Ramón del Valle-Inclán, que estrenó su primera obra por un empeño personal de Benavente.
Tras la guerra de España, que el autor había pasado en Valencia, Benavente hace pública su adhesión al bando vencedor y regresa a su casa de Madrid, donde – salvo un año que pasará en Buenos Aires – continúa escribiendo los últimos quince años de su vida. Durante ese tiempo, según nos muestran los estudios que se están realizando en Documentos para la Historia del Teatro español, Jacinto Benavente seguirá siendo el autor más representado de la cartelera. La base de datos de estrenos del Centro de Documentación Teatral cuenta más de doscientas cincuenta producciones de sus obras. En los últimos años, podemos destacar una nueva producción de La malquerida, por Alquibla Teatro, con dirección de Antonio Saura; y, en esta misma temporada, el estreno de Los números imaginarios, con dirección de Carlos Tuñón.
En los fondos del centro contamos con casi setecientas fotografías de obras de Benavente. Hemos preferido, en este caso, mostrar un retrato del autor (archivo CDT)
