Efemerideak
Victoria Parish, directora de circo.
En la primavera de 1930, una mujer dirigió el gran espectáculo de Circo con el que el célebre Circo Parish – ese fue el nombre durante medio siglo del antes y después conocido como Circo Price – volvía a la pista tras la muerte de su anterior director. Curiosamente, en los libros de Historia leemos que, tras la muerte de Leonard Parish, asumió la dirección el empresario Mariano Sánchez Rexach, olvidando los meses en los que la hermana de Leonard figuró como directora del Parish.
Para poner en el contexto adecuado esta nota conviene tal vez hacer un poco de historia:
En 1853, el écuyer Tomas Price se estableció en Madrid e instaló un circo en el Paseo de Recoletos. Conviene recordar que el circo como lo conocemos era un espectáculo reciente en esa época, y que su forma circular se debía precisamente al trabajo del écuyer. Un écuyer es un artista que hace exhibiciones de equilibrio a caballo.
Thomas Price falleció en un accidente en 1877. Asumió la dirección del circo Price otro écuyer, William Parish, que se había casado con la hija adoptiva de Price, Matilde de Fassi, también célebre como écuyere con el nombre de su padre adoptivo: Matilde Price.
Años después, en 1880 el señor Parish trasladó su circo a la plaza del Rey, a un solar que ya había sido ocupado por otros circos desde los años 30 de aquel siglo, haciendo construir el que fue, hasta 1970, el Circo Price, que durante sus primeros cincuenta años llevará el nombre de Circo Parish.
William Parish falleció en 1917 y, durante un breve período, Matilde Parish, que se ocupaba de la taquilla, asumió la dirección del circo, hasta su muerte, nueve meses más tarde. Hereda la dirección del circo Leonard Parish, el primogénito, que ya actuaba como director de pista. Leonard asumió esa labor durante doce años, hasta su muerte en un accidente de automóvil, camino de Lisboa, en febrero de 1930.
Así que, en 1930, asume la dirección del circo Price/Parish Victoria Parish, hermana de Leonard. Fueron unos meses, ya que en diciembre de ese año, como ya hemos escrito, Mariano Sánchez Rexach, socio de la familia Parish, se haría cargo de la dirección, recuperando el nombre de Circo Price, hasta su asesinato en 1936.
Dado que este pequeño período de dirección de Victoria Parish no aparece en los libros de Historia, tenemos que acudir a la prensa de la época para verificarlo:
“En el circo Parish, el sábado de gloria, a las diez treinta de la noche, primera presentación de la tradicional compañía de circo bajo la dirección de Victoria Parish, Trapecios volantes, acróbatas, alambristas, excéntricos, liliputienses, saltadores, patinadores, clowns y tozudos de la hilaridad”, anunciaba el diario ABC del viernes 18 de abril de 1930.
El redactor del periódico La Nación se coló en el ensayo general y nos habla de los cinco liliputienses Brodys; de los Bourbons, ágiles saltadores; de los Lingricen, graciosos patinadores cómicos; de Vincent y Filip, los payasos; de Los Otaris, famosos trapecistas rusos… William Parish, como hacía Leonard, su padre, toma parte en una rutina de los payasos.
El diario El Liberal nos da noticia del “franco éxito” que ha tenido el espectáculo circense dirigido por Victoria Parish, destacando a Vincent y Filip, excéntricos musicales que tuvieron que repetir hasta diez números, tocando a la perfección diversos instrumentos. También fueron muy aplaudidos los diez Otaris. Los Otari voladores eran una familia alemana, Franz y Luisa Matausch, con sus hijos, que en 1934 se instalarían en Estados Unidos, trabajando para el circo Ringling.
La Voz nos destaca otros números, como el de los barristas Los Callaerdos, “de notable flexibilidad ella y el muy seguro”; el alambrista español Alamar, que actuaba en Madrid por primera vez; Los hermanos Lerin y Les Lingreen, excéntricos y patinadores;Les bombons, excéntricos saltadores; Los ingleses Greenwood et Violet; Los liliputienses de Mr. Brody, anillistas y contorsionistas; Antonio, Félix, Isidro, Alejandro y Luis, tozudos de la hilaridad. Más la orquesta Nobody. Como otras publicaciones, la Voz destaca a Los Otaris y a los payasos Vincent y Filip, con una caricatura de este último.
En fin, dejamos aquí constancia de que en la primavera de 1930, hace ahora noventa años, una mujer llamada Victoria Parish fue la directora de un espectáculo de circo que tuvo un gran éxito en Madrid. Casi un siglo después, un magnífico circo perteneciente al ayuntamiento de esta ciudad mantiene el nombre de aquel écuyer de mediados del siglo XIX: Tomas Price. Y vuelve a tener el nombre de una mujer al frente de su equipo.
