Efemérides
PACO MARTÍNEZ SORIA TRIUNFABA EN EL TEATRO DE LA ZARZUELA.
En los años cuarenta, la programación del Teatro de la Zarzuela no siempre tenía que ver con el género lírico. Piezas como Marina o Rigoletto compartían temporada con espectáculos flamencos como los de Lola Flores y Manolo Caracol, o con compañías de comedias. Hace setenta años, en el Teatro de la Zarzuela reinaba por estos días uno de los cómicos más populares de España en el siglo XX: Paco Martínez Soria. El 20 de julio de 1942 estrenaba ¡Qué mala sangre tienes! de Antonio Paso y Manuel Paso: una de las nueve comedias de su repertorio que presentó en la Zarzuela durante aquel verano.
Martínez Soria (Tarazona, 1902 – Madrid, 1982) había comenzado tarde en el teatro, en 1938, en el Teatro Fontalba de Madrid, con Rafael López Somoza, quien a su vez había dado sus primeros pasos con Casimiro Ortas. De modo que nos encontramos ante una tradición de un siglo de una forma de hacer comedia.
Martínez Soria formó pronto su propia compañía: lo encontramos ya en la primavera de 1940 a la cabeza de su propia formación en el Teatro Urquinaona de Barcelona, representando una comedia de Vicente L'Hotellerie.
Durante aquel verano del 42, Paco Martínez Soria presentó en el Teatro de la Zarzuela las comedias ¡Viva Alcorcón, que es mi pueblo!, de Anselmo Carreño y Francisco Ramos de Castro, el 23 de junio; La luz, de Antonio Quintero, el 8 de julio; ¿Usted es Ortiz?, de Pedro Muñoz Seca, el 3 de agosto; Cualquiera lo sabe, de Jacinto Benavente, el 28 de agosto; La Condesa está triste, de Carlos Arniches, de 12 de agosto; La oca, de Muñoz Seca y Pérez Fernández, el 19 de agosto; La Caraba, de Muñoz Seca y Pérez Fernández, el 7 de septiembre; y ¡Cuidado con la Paca!, de José de Lucio, el 14 de septiembre. Martínez Soria había tomado el relevo de Josita Hernán y en octubre se lo cedería a otra compañía, la formada por Carmen Carbonell, Concha Catalá, Manuel González y Antonio Vico.
Durante décadas, Martínez Soria mantuvo su compañía de comedias y giró incesantemente con su repertorio, llevando en los últimos diez años de su vida algunas de ellas al cine. La más célebre – y su última película, de 1981 – fue La Tía de Carlos, de Brandon Thomas, que había estrenado con Laurita Pinillos el 26 de agosto de 1944 en el Teatro de la Zarzuela de Madrid y permaneció desde entonces en su repertorio.
