On this week in History
La llegada de Gómez
En estos días continúa ofreciendo en los escenarios su magnífica versión del Poema del Mío Cid. José Luis Gómez (Huelva, 1940) cumple precisamente este mes medio siglo sobre los escenarios españoles, una trayectoria larga y luminosa que lo ha convertido en uno de los artistas más importantes de nuestro país.
Informe para una academia, de Franz Kafka, se estrenó el 4 de noviembre de 1971 en Teatro María Guerrero de Madrid, como parte de la programación del Segundo Festival internacional de teatro de Madrid. El estreno contaba con la colaboración del Instituto Alemán en Madrid, era una producción de José Luis Gómez y Peter Fitzi. Gómez interpretó y puso en escena este monólogo con la ayuda de Eugenio Ríos. La caracterización se debió al maquillador alemán Henny Heutink.
El monólogo formó parte de un programa que se completaba con El pupilo quiere ser tutor, de Peter Handke, con escenografía y máscaras de Alfredo Alcaín y música de Manuel Garrido, que fue puesta en escena por el director suizo Peter Fitzi. Gómez fue El pupilo y Ramiro Fernández El tutor en esta obra sin palabras del autor austriaco.
José Luis Gómez era en ese momento un actor alemán. Nacido en Huelva, había ido a Alemania con la intención de estudiar cocina, pero pronto abandona esa idea y a los 21 años ingresa en el Instituto dramático de Wesfalia, Bochum. Se forma en Bochum y en Paris y a los 23 años, en 1964, comienza a trabajar como actor en los Teatros de Gelsenkirchen. Crea un espectáculo de mimo, Idilios del señor Meck, que resulta ser un gran éxito y gira a festivales de Zurich, Basilea, Praga, Berlín y Francfurt. Entre 1966 y 1968 trabajó como actor en los teatros de Nuremberg y fue coreógrafo y director de movimiento en obras como Los caballeros de Aristófanes, Vietrock de Megan Terry, Tras el diluvio de John Brown…
En 1968 se emite por la Südwestfunk de Baden-Baden su espectáculo Idilios del señor Meck. Gómez es contratado como actor y director de movimiento de la Kammerspiele de Munich. En 1970 realizó la coreografía del estreno mundial de Triunfo de la Muerte, de Ionesco, en Dusseldorf. Y en aquel año 1971, Gómez era profesor en el Mozarteum de Salzburgo y venía de una temporada de estudio con Grotowski en Polonia.
Aquel Informe para una academia se publicó en la revista Primer acto - número 139, diciembre de 1971 - con un largo artículo de Gómez en el que explica, por ejemplo, que su primer contacto con este texto escrito por Kafka en 1917 data de sus primeros tiempos de estudiante de teatro en Bochum, de 1962. También se refiere Gómez a la “terrible actualidad” del texto y nos regala unas valiosísimas notas sobre interpretación y disposición de la escena.
A partir de este espectáculo, comienza en España una carrera como actor de cine, teatro y televisión llena de éxitos y una trayectoria paralela como director de escena imprescindible en nuestra Historia. Se hace cargo, además, de proyectos como la dirección del Teatro Español, del Centro Dramático Nacional y la fundación del Teatro de la Abadía, donde, como hemos escrito en el inicio de esta nota, aún resuena el eco de su palabra en el magistral Mio Cid que ha repuesto en esta temporada 21-22.
Entre los fondos del CDAEM, encontramos este tesoro: la grabación de audio de aquel Informe para una academia.
