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Imagen: marcosGpunto
Juan Mayorga estrena 'El arte de la entrevista'
El autor aborda el conflicto entre una abuela, una madre y una hija.
La dicotomía realidad-teatro planea sobre El arte de la entrevista, la obra de Juan Mayorga que dirige Juan José Afonso en el María Guerrero dentro de la temporada del Centro Dramático Nacional. “Ese fantasma de Pirandello está en la obra”, admite Mayorga al referirse a un texto que plantea el conflicto familiar que desata la intromisión en un hogar de una cámara de vídeo. Una abuela, una madre y una nieta se ven las caras cuando la más pequeña llega a casa con un trabajo escolar: grabar una entrevista.
Un encargo del profesor de Filosofía, que ha invitado a su clase a una periodista para que hable de la ética de la entrevista. La oportunidad de hablar ante una cámara, de construir un relato ante un testigo, de actuar, desata el conflicto entre tres mujeres que se quieren pero que, como en toda familia, se afirman negándose. Tres actrices, Alicia Hermida, Luisa Martín, Elena Rivera, y un actor, Ramón Esquinas, interpretan esta pieza en la que su autor ve los colmillos de una Caperucita Roja oculta: “una madre, una abuela, una niña y una lobo, la cámara”. […]
Sobre un escenario que representa el jardín de una casa (es una familia de clase acomodada, una madre
alta ejecutiva y una abuela moderna y progresista), las tres mujeres van mostrando sus capas de verdad y de mentira. “Yo aún necesito más representaciones con el público para saber adónde nos lleva esta
obra”, asegura Alicia Hermida, en la piel de la abuela. “El teatro, como dice Bertolt Brecht, es comunicación y esa comunicación solo es con el público, uno se da cuenta cuando están o no contigo. Me gusta ensayar, pero siempre falta algo. Esto es una orquesta, todo tiene que sonar en su momento y a la vez”. […]
Mayorga advierte de que El arte de la entrevista no es una de esas obras en las que una familia se tira los trastos y defiende su texto como un lugar de experimentación para el actor y el director y de acción para el espectador. “En un mundo en el que todos llevamos una cámara en el bolsillo, todos somos personajes representado papeles y es difícil saber cuándo actuamos y cuándo no”. (Elsa Fernández-Santos)