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María Velasco. Foto: Daniel Alonso (Archivo CDT)
Formulando hipótesis teatrales
Arranca el ciclo Impulso ETC en la madrileña sala Cuarta Pared
Normalmente, cuando escuchamos palabras como “investigación” o “laboratorio”, se nos pierde la cabeza entre matraces y aceleradores de partículas, en el ámbito de la investigación por antonomasia: la científica. Bien es cierto que en el mundo del teatro también hay laboratorios e investigación, pero solemos pensar que es investigación de otro tipo. Pues no tanto: en la sala Cuarta Pared abordan la innovación teatral utilizando un método similar al científico. “Planteamos unas hipótesis y luego viene la parte experimental para demostrar esas hipótesis”, explica Javier Yagüe, director de la sala, quien, por cierto, empezó la carrera de Química antes de pasarse al teatro. “Hay experimentos científicos”, continúa, “que llegan a buen puerto y otros que no. Los que llegan a buen puerto entran en la industria y generan avances tecnológicos y los que no… ahí se quedan”.
En teatro, según Yagüe, todo esto es más “ambiguo”, pero han intentado ajustarse a ese modelo dentro del laboratorio Espacio Teatro Contemporáneo (ETC). El resultado —algunos de esos experimentos que han llegado a buen puerto— se puede ver en la propia sala durante el ciclo “Impulso ETC”, que estrena cuatro obras variadas e innovadoras hasta el 15 de marzo. “Se han hecho experimentos de investigación pura”, explica el director siguiendo con el símil científico, con el fin de “generar conocimientos para la profesión. Y luego, lo que se va a mostrar, es la investigación aplicada”. [...]
Eso sí, las cosas están bien feas para el gremio: a finales de enero los resultados de un informe de la Artistas Intérpretes, Sociedad de Gestión (AISGE) arrojaban que el 73% de los actores y bailarines no pueden vivir de su trabajo. “Es necesario apoyo institucional para hacer que la gente no viva en precario. La subsistencia en precariedad no es buena porque a la larga, la gente se agota”, dice el director. [...]
Otra necesidad que no permite este estado de precariedad es la de trabajar a largo plazo. “Es lo que intentamos en ETC”, dice el director, “queremos que la creatividad se desarrolle y haya innovación, y para eso hay que poder trabajar a largo plazo. Si no, uno tiende a repetirse porque no tiene capacidad de avanzar. El del largo plazo es, de alguna manera, el mismo problema que existe en la investigación científica”. Al final, la ciencia y el teatro se van a parecer hasta en sus problemas. (Sergio C. Fanjul)