El jurado de la cuarta edición de los Premios Ceres ha decidido, por unanimidad, conceder el galardón a la Mejor Actriz a Aitana Sánchez-Gijón por su desgarradora interpretación en Medea, de Andrés Lima, espectáculo que se enmarca dentro del proyecto de investigación teatral del Teatro de la Ciudad que se estrenó en Madrid y que ha acogido esta edición del Festival en julio.
La actriz se mete en la piel de una mujer desesperada y desquiciada por los celos y la amargura hasta el punto de estar dispuesta a todo por vengarse del hombre que de repente le niega el amor.
La ceremonia de entrega tendrá lugar el 27 de agosto en el Teatro Romano de Mérida. En las tres ediciones anteriores de los Premios Ceres fueron galardonados con el premio a la mejor actriz Kiti Mánver (2014), Vicky Peña (2013) y Amparo Baró (2012).
Aitana Sánchez-Gijón (Roma, 1968 ) inició su carrera como actriz muy joven, alternando trabajos en teatro, cine y televisión donde ha demostrado su capacidad interpretativa en personajes de todo tipo. "Todo esto ha ido brotando en los ensayos desde el primer día de manera muy clara, como que el camino del dolor estaba ya trazado y a partir de ahí todo ha ido saliendo como sin esfuerzo. Como si de alguna manera se hubiera apartado de mí el lado racional y analítico que tengo, me he quitado resistencias y control y me he dejado llevar", explica Sánchez-Gijón sobre Medea, el que se ha considerado uno de los papeles más atrayentes de toda su trayectoria por la crítica especializada.
La actriz ha trabajado con grandes nombres de la escena como Mario Vargas Llosa, con quien compartió escenario en repetidas ocasiones bajo la dirección de Joan Ollé como en Las mil noches y una noche, La verdad de las mentiras, La Chunga, Los cuentos de la peste y Odiseo y Penélope, ésta última representada en el Festival de Mérida en 2006. También se ha puesto a las órdenes de Mario Gas, con La gata sobre el tejado de zinc caliente y Las criadas; y a las de Tamzin Townsen, con Un Dios Salvaje y Babel. Otras de las interpretaciones más sobresalientes de su carrera teatral son A puerta cerrada, de Miguel Narros, y Capitalismo, de Andrés Lima. [...]
En cine, inició su andadura en los ochenta participando en conocidos cintas como Bajarse al moro, de Fernando Colomo, y El mar y el tiempo, de Fernando Fernán Gómez. Una carrera que se vio consolidada nacional e internacionalmente en la década de los noventa con trabajos como Boca a boca, de Manuel Gómez Pereira; El pájaro de la felicidad, de Pilar Miró; o Celos, de Vicente Aranda, entre otros. Años después fueron sumándose títulos a la lista como Un paseo por las nubes, de Alfonso Arau; La camarera del Titanic, de Bigas Luna; o Volaverunt, papel que le hizo alzarse con el Premio a la Mejor Actriz en el Festival de Cine de San Sebastián.[...]