Figuras. Entrevistas de la escena

José Antonio Campos Tetúan, 1940. Gestor de Artes Escénicas

(40'13")

A lo largo de cinco décadas José Antonio Campos ha trabajado para ministros de Información y Turismo, como Manuel Fraga Iribarne y Pío Cabanillas (en dos ocasiones). Posteriormente para titulares de Cultura, como Manuel Clavero, Ricardo de la Cierva, Íñigo Cavero, Soledad Becerril, Javier Solana, Jorge Semprún, Jordi Solé Tura, Carmen Alborch, Mariano Rajoy, Esperanza Aguirre, Pilar del Castillo, Carmen Calvo y César Antonio de Molina. Finalmente con Alberto Ruiz-Gallardón en su etapa de Presidente de la Comunidad y la de Alcalde de Madrid, bajo las órdenes de Alicia Moreno. Siempre luchó por la excelencia en las artes escénicas y porque fueran cuestión de Estado, lo que le ha valido un gran prestigio entre las gentes de la cultura.

  • Fecha: 15 de abril de 2019.
  • Lugar: Teatro de la Zarzuela de Madrid.
  • Duración: 40'13" (extracto de una entrevista de una duración total de 1h 29'07").
  • Operador de cámara: Víctor Camargo.
  • Realización y edición: Ana Lillo.
  • Entrevista realizada por: Rosana Torres.
  • Créditos de Fotografías
    Pilar Cembrero, Chicho, Jorge Esquerra, Montse Faixat Ensesa, Gyenes, Juman, Kalus Hennch, Vicente Ibáñez, Sabine Keck, Francisco Melich, Ros Ribas, Fernando Suárez y archivo personal de José Antonio Campos.
  • Créditos de los vídeos
    Equipo de grabaciones del CTE
  • Créditos de músicas
    French Jazz Bistrot by Motion Audio
    Documentary by BeastAudio
  • Agradecimientos
    Teatro de la Zarzuela

Tres momentos de la entrevista

Luchando por la excelencia

Sale con su familia de su ciudad natal, Tetuán, en la adolescencia y acaba la carrera de Derecho en Granada, donde saca unas oposiciones para trabajar en la Administración del Estado. Solicitó ir a Información y Turismo, pensando que aquello sería más divertido. Pero en Murcia, su primer destino, se enfrentó a la realidad, ya que tenía que vivir inmerso dentro de algo tan contradictorio como era cultura y franquismo. Puro oxímoron. En sus inicios profesionales le tocaba preparar un sistema para que vinieran las suecas en bikini, ya que el franquismo metía el turismo en el paquete de cultura, pero simultáneamente buscaba cómo saltarse la censura y la prohibición de los bikinis sobre los escenarios. Ahí descubrió que el que hace la ley hace la trampa y que había resquicios para interpretarla, sin que la cabeza, la suya, acabara sumergida en la esquizofrenia.

Es la etapa en la que se relaciona con grandes figuras del mundo de la cultura, especialmente del teatro y la lírica y que, como él, sobreviven en un país oscuro en el que se les cortaba las alas, el oxígeno y la libertad de pensamiento. Pero el hecho es que, en el mundo del teatro, la censura y la represión pudieron ser sorteadas con ingenio y con talento en muchas ocasiones. No hay que olvidar que los teatros públicos recayeron en manos de grandísimos creadores como Luis Escobar, José Tamayo y José Luis Alonso, que, como dice Campos, tuvieron un poder importante en la configuración del teatro público de este país. Y lo más curioso, es que pudieron crear obras muy importantes y pseudoprohibidas, sin que se tuviera en cuenta su orientación sexual.

En el año 1976 Campos recibe la transición como una bocanada de aire fresco. Tras la creación del Ministerio de Cultura en 1977, desempeña numerosas responsabilidades de gestión administrativa y artística y asume los cargos, sucesivamente, de subdirector general de actividades teatrales, de espectáculos, de teatro y de música. Es una etapa en la que está todo por hacer y la voz y la profesionalidad de Campos, fueron fundamentales en ese periodo de la historia.

En 1985 el Ministerio de Cultura crea el INAEM (Instituto Nacional de las Artes Escénicas y de la Música), como organismo autónomo de ese departamento, y Campos vive una etapa repleta de proyectos y aventuras profesionales que le convierten en una de las personas con más prestigio estando dentro de la administración y siendo funcionario de carrera. Es un periodo fructífero en el que ejerce de subdirector general de música, sobreintendente del Teatro Lírico Nacional de la Zarzuela, de junio de 1985 a diciembre de 1990. Subdirector general de coordinación artística, posteriormente de música y danza y en junio de 2003 es nombrado, nuevamente, director del Teatro de la Zarzuela, labor que ejerció hasta su nombramiento, en mayo de 2004, como director general del INAEM.

También ha ejercido otras responsabilidades de gestión artística fuera de la administración del estado, como vicepresidente de la asociación europea de teatros líricos y director artístico del Auditorio de la Exposición Universal de Sevilla (1991-1992).

En la etapa que trabajó con Alicia Moreno Espert, reconocida profesional del mundo de la gestión cultural, en la Comunidad de Madrid, fue viceconsejero de las Artes, cuando se puso en marcha los Teatros del Canal. En el Ayuntamiento de Madrid, y también llamado por ella, fue Consejero Delegado de MACSA, empresa municipal que se creó para facilitar las contrataciones con el mundo de la cultura, y en esa etapa nacen las Naves del Matadero y el Teatro Circo Price.

En 2011 se jubila y en la actualidad sigue activo, viendo los toros desde la barrera, pero sin dejar de ser un consumidor casi compulsivo de literatura, y disfrutando de los diferentes géneros que existen en el mundo de las artes escénicas.

Rosana Torres

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