( El teatro en el instituto - I )

Características de la escritura dramática (II)

¿Qué sentís cuando veis vuestras obras representadas? Esta fue la pregunta que una de las estudiantes les lanzó a los autores. Las respuestas fueron diferentes, como las propias vivencias de los autores. Yolanda García Serrano nos habla de sentimientos contradictorios, desde el rechazo absoluto hacia algunas puestas en escena de sus obras, hasta la sensación de que lo que ha visto en escena mejoraba enormemente el texto que ella había escrito.

Yolanda García Serrano

 

El teatro se hace con los demás, y es contraproducente pensar que el texto escrito por el autor debe ponerse en escena tal y como él lo imaginó. El actor aporta todo un mundo de matices que no estaban previstos en el texto y que casi siempre enriquecen lo que el autor imaginó. Hay veces en que el solo trasvase del folio escrito a mano a la pantalla del ordenador hace que la percepción que tiene el autor de su obra se modifique. Cuánto más si lo escucha representado por el actor.

Jesús Campos García

La relación con los actores fue otro de los motivos de interés. Su implicación en la puesta en escena, su talento, su dedicación o su adecuación al papel son temas que surgieron a propósito de esta pregunta.

Javier de Dios e Ignacio del Moral

Modificando el texto para la representación. Poner en escena un texto supone en muchos adaptarlo, modificarlo a las circunstancias de los intérpretes o incluso a las características del público que lo va a presenciar. El autor dramático tiene que contar con esta circunstancia, y eso a veces supone un proceso que puede no ser de su agrado.

Javier de Dios e Ignacio del Moral

¿Se representan siempre las obras que los autores escriben? Pues no siempre es así. Hay obras que consiguen representarse ante el público y otras que no. Incluso los autores más reconocidos guardan en su cajón obras secretas que casi nadie conoce.

Javier de Dios e Ignacio del Moral